domingo, 18 de noviembre de 2012

Rutina


No estoy de acuerdo con que los domingos sean depresivos. Lo que sí creo es que, contrariamente a lo que se dice, son tan o más rutinarios que cualquier día de la semana. El asado, el mate, el fútbol, la cena con las sobras de la semana (si no es café con leche), y algún que otro programa de televisión conducido por idiotas como Marley o Julián Weich, mientras esperamos morir en ese instante o el comienzo la semana, lo que sería prácticamente lo mismo.

lunes, 12 de noviembre de 2012

El comentario irritante (por Mi Vieja)


-“Má, te cuento: ¿Te acordás que te conté sobre ese proyecto de la facultad? Bueno, me pagaron un viaje para ir a presentarlo a Harvard. Viajé, todo muy lindo. El último día, a modo de cierre, comimos unos pescados que estaban terribles…”
-“Ay, ojo nene, ojo con las espinas del pescado, sabes cuánta gente murió…”

lunes, 5 de noviembre de 2012

¿Cómo saberlo?


Uno a veces exagera cuando se mete de lleno con alguna temática, más aun cuando se trata de algo que lo afecta directamente. En este caso son varias las veces que traté de maniobrar la puerta de la heladera, espiando casi para hacerle creer a la misma que en realidad no estoy prestando atención, haciéndome el distraído y sin pensar que, en realidad, estoy tratando con un artefacto eléctrico, y poder comprobar finalmente si la maldita luz se apaga cuando la misma se encuentra cerrada.