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Existen dos momentos en los que uno por fin decide cortarse las uñas: uno, el más común, es cuando estamos totalmente al pedo. El otro, cuando ya se trata de una necesidad, es cuando nos limpiamos las orejas y sale algo más que cera…

Momentos..

Maldito el momento en el que ante la espera de algún trámite uno se encuentra realizando cosas estúpidas como corroborar que todos los datos en su documento son correctos..