Todos los días uno escucha cosas con las que puede estar de acuerdo o no. En mi caso, particularmente, además de escuchar cosas con las que discrepo, provoco una ira en mi interior, que naturalmente, me hacen penar. Además de esto, cuando soy yo el que opina sobre algún determinado tema, hay personas que se empecinan en hacerme callar la boca. Creo yo que esto es un tanto injusto, porque no considero a las cosas que pienso una estupidez (no siempre).
Si una persona piensa y expresa de que “el Diego” debería haber partido de este mundo (al que nunca perteneció) luego de su espectacular Copa del Mundo del´86, entonces yo tengo la libertad de pensar…